Pasillo oscuro, silencio incomodo, un personaje cualquiera va caminando muy despacio en busca de alguien o algo, sabe que se debe alejar de ahí, pero, aun así, no se detiene; de repente, aparece una figura fantasmagórica al mismo tiempo que, de golpe, se escucha un grito, gruñido o lamento… el espectador salta de la silla, a pesar de que ya sabía lo que iba a suceder. La receta se repite una y otra vez, hasta que aburre y deja de sorprender. Así se resumen la gran mayoría de historias de terror que llegan a las salas cine cada mes y es la firma de la saga de películas del Expediente Warren que, si bien tuvo un acierto gracias a las dos primeras entregas de El Conjuro, con La maldición de La Llorona, que supuestamente es otro capítulo de este universo, da un paso en falso. Inspirada en la famosa leyenda latinoamericana sobre ese espíritu condenado al lamento eterno por haber asesinado a sus hijos, la cinta se ubica en Los Ángeles de la década del 70, y cuenta la historia de A...