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La peste humana

“¿Por qué a mí, si no he sido un mal perro?” Se lamenta Rowf exhausto luego de haber sobrevivido a otro día de tortura. Es sujeto de experimentación en un laboratorio oculto entre las montañas, pero él lo ignora. Solo sabe que, periódicamente, personas de túnicas blancas lo meten a un tanque lleno de agua, para medir su capacidad de resistencia, tomar el tiempo y hacer cálculos. Cuando está a punto de ahogarse, cuando lentamente se hunde y todo se convierte en un oscuro silencio, entonces lo rescatan, le sacan el agua que tragó y, literalmente, lo tiran en una jaula. Rowf es un cruce de labrador, es negro y está viejo. No entiende a los humanos y muchos menos las razones que tienen para torturarlo. En la jaula de enseguida está Snitter, un fox terrier blanco con pintas cafés, es un poco más joven, pero recuerda haber tenido un buen amo, tal vez eso lo lleva a creer que hay esperanza de encontrar a personas que los ayuden, por eso convence a Rowf de escapar cuando

Te quiero... pero como amigo

Esta divertida historia resume lo que le pasa a un hombre cuando se enamora de su mejor amiga, pero esta no le presta ni la más mínima atención. Disfrútenlo.

Las 3 mejores canciones de Suicide Squad

Número 1: Bohemian Rhapsody.  Jamás sale en la película, pero fue la que nos emocionó durante los avances. Ver aparecer a cada uno de los supervillanos, al ritmo de la introducción a capela de la canción de Queen, eriza la piel. Lástima que solo haya sido eso.  Número 2: Sucker for Pain  es una canción hecha para la banda sonora que aparece en los créditos finales de la cinta. La combinación de rap con rock alternativo va muy bien con este equipo de antihéroes. Número 3: You Don't Own Me. Se escucha de fondo en una de las escenas introductorias de la sensual Harley Quinn. El ritmo y la forma en que es utilizada refleja muy bien su personalidad sicótica, una de las pocas que resalta en la cinta.

Sin palabras

El sexo nunca ha sido importante en la vida de Ann Bishop Mullany, una mujer casada y cautelosa, que le cuesta intimar con los demás, y que se obsesiona fácilmente con catástrofes mundiales, para evadir sus problemas. Su esposo, John, es un abogado cuya carrera está en ascenso, así como su éxito con las mujeres, que lo ha llevado a acostarse frecuentemente con su cuñada, Cynthia, que, a diferencia de su hermana, quiere vivir una vida sexual sin ataduras y sin piedad con los implicados. A este triángulo amoroso y de mentiras llega Graham, un viejo amigo de John, que con su franqueza consigue acercarse a Ann, generando una fuerte atracción al confesarle que es impotente. Sin embargo, su mayor secreto está en una pila de cintas de video con nombres de mujer, en las que varias chicas confiesan sus secretos más íntimos, frente a la cámara. La tentación de perder el pudor, y la curiosidad por confrontar los misterios de este hombre son los sentimientos que embargan a Ann y a los

La familia no se elige

Harold Meyerowitz (Dustin Hoffman) es un escultor fracasado, de éxitos olvidados en algún estante, un artista contestatario que parece no estar dispuesto a perdonarle a la vida que le haya negado la oportunidad de triunfar y que sí se la haya dado a otros de habilidades inferiores. A pesar de tener más de 70 años, una universidad le ha dado la oportunidad de realizar lo que probablemente sea su última exhibición, un evento pírrico, quizás hasta irrelevante, pero que se constituye en la excusa ideal para propiciar el reencuentro de sus hijos, fruto de dos, de sus cuatro matrimonios. Danny Meyerowitz (Adam Sandler) es el hijo mayor de Harold, un músico que solo compuso unas pocas canciones y cuyo mayor logro fue haber sido profesor de piano. Nunca trabajó, fue un señor de casa que se dedicó a criar a su hija, quizás proyectando todo el amor que jamás recibió de su padre. Acaba de separarse y su hija se ha marchado a la universidad. Matthew Meyerowitz (Ben Stiller) es el hijo m

Gladiadores con raqueta

Cambiar la historia del tenis era la misión de Björn Borg y John McEnroe, cuando llegaron al campeonato de Wimbledon, en 1980. Si ganaba, el primero alcanzaría ese título por quinta vez consecutiva, todo un hito para su carrera deportiva, en la que ya ostentaba el puesto número 1 del ránking de la época, con tan solo 24 años. Por su parte, McEnroe, la estrella en ascenso, llegaba con la misión de obtener por primera vez la copa de ese torneo, y era visto por la prensa especializada y el público como el único capaz de arrebatarle la gloria a su rival sueco. Ese camino, desde su aterrizaje en Londres, hasta el partido final, recordado como uno de los más sublimes de la historia del tenis, es enmarcado por el director Janus Metz, en la cinta Borg-McEnroe, un thriller que traslada el suspenso a la cancha, y que convierte a ambos deportistas en personajes merecedores de una historia en pantalla grande. ‘El Hielo’ y ‘El Fuego’, como fueron llamados en distintos medios de c

It, más allá del terror

No, no se equivoque, It no es una película de terror, no lo traumatizará ni le impedirá dormir en las noches. Sí, tiene momentos en los que lo sorprenderá, le acelerarán el ritmo cardíaco y hasta lo harán gritar, pero estos no serán el común denominador. Durante los 135 minutos del metraje, tal vez se ría más de lo que imagina, y, si se fija detenidamente, el diseño del payaso, aunque más elaborado, le parecerá menos aterrador que el de la adaptación de los años 90. Cuando entre en la sala de cine no lo haga pensando que van a despertar sus más ocultos terrores infantiles, ya que podría decepcionarse. Despójese de todos los prejuicios, y se encontrará con una de las mejores películas del año. *** En It, se cuenta la historia de siete amigos: Bill, Richie, Beverly, Ben, Eddy, Stan y Mike, que, en el verano de 1989, se aventuran a investigar las misteriosas desapariciones de niños, ocurridas en el pueblo de Derry. Juntos descubren que la causa es una entidad maligna que